Hamburgo, Miercoles, 12 de Mayo de 2010, fecha que quedará grabada a fuego vivo en la memoria de todos los Atléticos.
Mi Atleti, primer equipo en ganar la Europe League, competición heredera de la antigua Copa de la Uefa.
Han tenido que pasar cuarenta y seis años desdes que mítico capitán atlético, Enrique Collado, levantara hasta ayer el primer título europeo del At. de Madrid.
Veintiseis años para que mis ojos vieran a mi equipo ganar un título europeo.
Catorce años de aquel mítico doblete, de ese gol de infarto en la prorroga frente al Barcelona, realizado por el recordado y querido Milinko Pantic; catorce años de el último partido de liga frente al Albacete en el Vicente Calderón, en el que los atleticos nos proclamamos campeones de liga.
Anoche nos dimos cita en la fuente de la Constitución numerosos aficionados rojiblancos.
Parejas de novios, amigos, familias enteras de abuelos a nietos.
Por que ser del Atleti, es algo muy grande, es un sentimiento que se lleva muy hondo, tan hondo, que proviene del mismo alma y corazón, es grandeza, pero a la vez es estar preparado para lo peor, por que de sufrimientos sabemos mucho los aficionados rojiblancos.
Pero es algo que solo se transmite de generación en generación, de padres a hijos, y cuentan prestigiosos investigadores que se transmite en la sangre, precisamente en el cromosoma 19 del brazo derecho.
Soy Rojiblanco desde la cuna, pero ayer volví a ver la cara de mi padre en la fuente, era la misma cara de felicidad de hace catorce años, me volví a ver con él y con mi amigo Victor, con tío José Mari, con mi Popo y Candela, y ahora con más gente Atlética, y mi primo Sergio. Hace tiempo que supe la respuesta de por que soy del Atlético, pero viendo ayer la cara de mi primo Sergio, recordé porque somos de Atletico.
Ser del Atleti, es como ser Costalero, estar preparado para las peleas mas gordas y desagradecidas, hay que saber sufrirlas.
Es como el toreo de José Tomás, que sólo lo saben paladear unos cuantos, y lo derrotan otros envidiosos. De siempre se a dicho, que la miel no estaba hecha para la boca del asno.
Es ser murallero de Soto Mancera, es llevar en las venas la sangre de mi Paquita y de la "Sole" para más señas.
Duda resuelta, creo que mi Sergio, ayer supo que es ser del Atleti.
