De iquierda a derecha, Miguel, más conocido por Romanco, Agustín y un sevidor, en un ensayo de María Auxiliadora.
Vivan las cuadrillas de amigos; y no me canso de decirlo, son las que funcionan, ya que con mis amigos al fin del mundo, y si están debajo de los pasos, pués imaginaros el taco que se puede formar.
2 comentarios:
Jejeje, la había visto antes en el tuenti, con gente asi se va a todos sitios, por cuestas, cruzando puentes...jejeje, un abrazo amigos¡¡¡
Con gente como esta y como tú, se va a cualquier lado a trabajar cofradías, Badajoz, León, Cuenca, Sevilla, Cádiz....
Anda que de eso de cruzar puentes y subir cuestas damos buena cuenta nosotros, jajaja. Un abrazo muy fuerte.
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